lunes, 16 de noviembre de 2009

El deseo es un cuerpo extraño que vive en un cerebro podrido

El porqué de este engranaje no es tan importante como descubrir que ésto sucede. La compasión ahuyenta de forma misteriosa al egoísta que todos llevamos dentro. Cuando dejas de amar, comienzas a consumir. Da igual relaciones personales o yogures, porque, a día de hoy, ambos tienen fecha de caducidad. Lo que en realidad nos mueve es fácil de descubrir: sexo y dinero. La verdad suele ser más oscura que una sombra.